FB

viernes, 10 de abril de 2015

Ensalada de libro. Mens sana in corpore sano

Que no todo van a ser dulces en esta vida, ni tan difíciles de preparar (si me das la razón es que eres más flojo que un puñao pelusa). También puedes comer afrecho, ele ahí mi gitanillo. O birlarle un chorizo al frigo, desos mirlaos como mojamas.
Ea, a cocinar sin tener que cocinar.
ENSALADA VELADA, FUNDIDA EN NEGRA
Ingredientes para 1 persona (soes, a los demás que les den):
-Brotes tiernos lechuguiles
-Especias Garam Masala
-Atún rojo fresco
-Tofu
-Cúrcuma
-Aguacate
-Vinagre balsámico de Módena (crema)
-Nueces
Preparación:
Te vas a partir los cuernos, chaval.
Corta tantos cuadraditos de atún como te vayas a zampar y los cocinas a la plancha, Garam Masala mediante. Crujentito por fuera y jugoso por dentro mucho más mejor, onde vaparar.
El tofú lo plancheas también en cuadraditos con un pelín de cúrcuma (casi que ni lo huela ni coja color siquiera).
Hala, en un cuenco de cristal lo mezclas todo, lo que falta con lo que salta, y le echas el baslámico de Módena.
Y A PECAR.
FUNDIDO EN NEGRO
Una novelita discreta en ventas que, sin embargo, es la caña de España. Me la leí de tres o cuatro sentadas, por falta de tiempo que no de interés (ya lo veréis, echadle un ojo). De hecho siempre me llevabanque no me iba yo sola los demonios camino del trabajo, o dormir (aunque solo fueran 4 o 5 horas). Medio realismo sucio medio Larsson perdío, Germán Temprano ata y desata la vida de Marco Torralba y su mujer, Berta, polla de Tristán mediante (¿qué? ¿Queda feo decir polla? Polla, polla, polla, polla...).
Cuando cerré la última página del libro, cambiada la visión que me había imaginado de algunos de los personajes, me quedé con esa sensación de estar satisfecha lecturilmente hablando; justo eso era lo que quería, aunque no lo supiera.